«La creatividad nace de la angustia como el día nace de anoche oscura. Es en las crisis que nacen la inventiva los descubrimientos y las grandes estrategias». – Albert Einstein
Las crisis económicas en ocasiones además de ser inevitables pueden traer consigo nuevas oportunidades y nuevos replanteamientos sobre los aspectos que un director general tiene que tener en cuenta para dirigir la empresa.
Compartir la experiencia de los directivos generales que se han enfrentado a situaciones de crisis puede ser muy útil para otros directivos que se encuentren actualmente afrontando este tipo de situaciones.
En resumen existen 6 aspectos importantes que tendrían que tener en cuenta:
El líder tiene que ser optimista pero sin ocultar la gravedad de la situación en la que se encuentre la empresa. Se ha de encontrar la justa medida entre la prudencia y el alarmismo. Encontrando el equilibrio adecuado se pueden tomar mejor las decisiones y acciones que se tengan que llevar a cabo.
– Mantener suficiente efectivo: «Las empresas no cobran por falta de utilidad, sino por falta de efectivo»
El crédito suele ser el recurso más escaso en las crisis por lo que en la medida de lo posible es sumamente importante mantener suficiente efectivo. El capital de trabajo se ha de optimizar reduciendo inventario de manera prudente así cómo las cuentas por cobrar mientras se aumentan las cuentas por pagar.
– Compartir los problemas: «Se predica con el ejemplo»
Los líderes deben aprender la importancia que tiene el compartir los problemas con el equipo para poder buscar y encontrar juntos las soluciones a los mismos. Aislarse y soportar la presión de forma individual puede conducir a un bloqueo y por lo tanto a una probable no acertada toma de decisiones.
– Mantener los valores: «No pedir a los demás sacrificios que uno no esté dispuesto a hacer»
En momentos de crisis es cuando se ha de poner de manifiesto los valores que promueve una empresa por lo que será de suma importancia seguir un código ético tanto para los empleados como para los clientes siempre teniendo en cuenta el bienestar y el sacrificio que puede suponer para éstos la toma de decisiones que se lleva a cabo para solventar la situación.
–Anticipación y creación de cambios para no desaprovechar la crisis: «Las crisis ofrecen una plataforma ideal para implementar con un sentido de urgencia muchos cambios que de todas maneras hacían falta»